Somos Economía Circular

"Busco ser un líder sencillo y acompañar a todos los equipos"

1. ¿Como evalúas este tiempo como Gerente General de Armony?

Mi experiencia ha sido muy positiva, me he sentido muy cómodo. En un principio no me imaginé en esta posición, pero luego de pensarlo me convencí que era una buena oportunidad y que había que tomarla. Siento que las cosas se han ido dando muy bien. Veo que Armony es una empresa que está muy comprometida con lo que hace y veo también que todos los equipo se ayudan y hay un real compromiso. Es una organización en la que todos están comprometidos con la causa y eso me ha permitido avanzar de manera tranquila sin tener que estar encima de todo. Busco ser un líder sencillo y poder acompañar a todos los equipos. Me gusta mucho trabajar acá, en un buen ambiente, es algo que me pone contento y que nunca sentí cuando trabajé en empresas más grandes. Veo que Armony tiene mucho potencial, he visto cómo nos requieren otras organizaciones, clientes y proveedores. Eso nos demuestra que la preocupación por el medio ambiente no es una moda sino un tema ya instalado en la sociedad.

2. A la cabeza de Armony, ¿cuáles son tus prioridades ahora y hacia el futuro?

Mi primera prioridad es mantener y potenciar la familia Armony, lo que somos actualmente. Que cada uno de nosotros venga a trabajar contento y que encuentre acá un espacio de tranquilidad y acogida.

Mi segundo foco es que Armony siga siendo líder en reciclaje orgánico y para eso debemos mejorar cada día nuestros procesos y forma de trabajar a fin de lograr la mejor gestión de nuestras externalidades, las cuales buscamos ir mejorando cada día con acciones innovadoras y sustentables. Para eso es necesario reforzar el proceso de compostaje. Estamos trabajando en traer la última tecnología de Europa que minimiza al máximo el olor de nuestro proceso. Quiero que Armony no genere ninguna externalidad negativa, que seamos buenos vecinos y reconocidos como un real aporte al medioambiente y a la economía del país.

Mi tercera prioridad es el crecimiento interregional de Armony, estamos con miras a crecer en el sur y en el norte de Chile y hacia otros lugares de la Región Metropolitana. Somos una solución al problema de la basura, valorizando residuos de forma segura, confiable y sustentable, evitando su disposición en rellenos sanitarios y cerrando el ciclo de la economía circular. Es importante que podamos entregar eso en todas las regiones de Chile.

3. ¿Local Compost, -el programa que desarrolló Armony y que apunta a la gestión de los residuos orgánicos para los municipios-, va en esa línea?

Local Compost es una de las soluciones que estamos trabajando en alianza con Chicureo Sustentable con el objetivo de llevar el reciclaje a todo Chile, a través de una red de plantas de compostaje con foco en la educación y la participación local. Es un programa que ofrece una alternativa sostenible para la gestión de residuos orgánicos en los municipios. Esa es una parte de la descentralización, a escala pequeña. A escala más industrial estamos trabajando el los proyectos sur, norte y Región Metropolitana que mencioné anteriormente.

Mi cuarta prioridad es la internacionalización, un sueño que espero se cumpla. El primer país sería Colombia, luego Perú y España.

4. ¿Cuál es tu evaluación respecto al entendimiento e importancia de conceptos como sustentabilidad y economía circular por parte de la sociedad?, ¿crees que se ha generado más conciencia en estos temas?

Se acaba de publicar el informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) de la ONU, y dice claramente que aunque los países redujeran drásticamente sus emisiones, la temperatura de la Tierra aumentará en 1,5ºC en dos décadas, poniendo en peligro la vida de al menos 1000 millones de personas en todo el mundo. Sequía y extinciones de flora y fauna son solo algunos de los efectos que tendremos que enfrentar.
Los daños causados por el cambio climático ya son inevitables, pero todavía podemos actuar para que la situación no empeore aún más y desde Armony trabajamos para ello.
Anualmente, desviamos en la Región Metropolitana 100 mil toneladas de residuos orgánicos que antes iban a parar a un relleno sanitario. Lo que antes generaba metano hoy lo transformamos en productos orgánicos que reforestan árboles, producen oxígeno , recuperan suelos y entregan la posibilidad de revivir la flora nativa, agrícola y de jardines y huertos urbanos.

Creo que como sociedad hemos avanzado harto, pero aún queda muchísimo por hacer. Revertir los efectos del cambio climático y el cuidado del medio ambiente pasa por la responsabilidad de cada uno así como la educación, fomentar una cultura medioambiental generar conciencia, y eso es tarea de todos. Empresas, privados, mundo público, colegios y hogares no podemos seguir teniendo roles pasivos en esto. En Armony hemos transitado del querer hacia el poder y hoy hacia el deber; "quiero ser sustentable, puedo ser sustentable, debo ser sustentable". Hoy nos estamos adelantando para hacer posible lo que es y deberá ser obligatorio en el futuro.

VSPT Wine Group y Armony juntos en la compostación de residusor orgánicos en terreno: Historia de un proyecto sustentable basado en la convicción y confianza

Cada mes, el casino de nuestra planta Molina VSPT Wine Group, genera 1,5 toneladas de residuos de alimentos. Hasta el año pasado esos residuos eran llevados a un relleno sanitario, cuyo retiro se hacía 3 veces a la semana. Todo en regla, pero en VSPT Wine Group estamos comprometidos con gestionar el 100% de nuestros residuos industriales, por lo que algo faltaba para que el proceso fuera totalmente circular.

Fue cuando conocimos a Armony y su solución Armony System, un contenedor móvil que composta los residuos orgánicos in situ y los transforma en compost. Su proceso, eficiente y sustentable, disminuye los traslados y la huella de carbono.

Luego de 19 semanas de su instalación en la planta Molina, hemos logrado gestionar de forma sustentable el 100% de nuestros residuos orgánicos en lo que va del año.
En el primer retiro, pudimos reducir de 57 viajes que se hacían de la planta en Molina a un relleno sanitario a solo 1, desde la planta Molina a la Planta Armony en Pudahuel, lo que equivale a 5000 kms menos recorridos, con implicancias positivas en todos los frentes posibles. No solo disminuimos los traslados, reduciendo la huella de carbono y el volumen de residuos destinados a rellenos sanitarios, sino también la generación de gas metano (GEI) asociada a la degradación anaeróbica de los residuos orgánicos.

Logramos acopiar 7.755 kgs, los cuales fueron trasladados a la planta de compostaje Armony, donde finaliza su proceso, dejando de ser residuo y pasando a transformarse en aproximadamente 1.500 kg de compost.

Al igual que Armony, vamos en la búsqueda de la sustentabilidad, promoviendo la innovación. En este proyecto ambas empresa actuamos con convicción y confiando en el otro. Nosotros creímos que esto funcionaba y avanzamos. Armony confió en que dispondríamos los residuos de la manera correcta.

Si bien en VSPT Wine Group, hace más de 10 años que trabajamos la sustentabilidad y la innovación y en la actualidad son valores corporativos, creo que hoy todas las empresas tienen un rol protagónico en este tema, debemos estar más conscientes de la relevancia de entender nuestros impactos positivos y negativos en la sociedad y el medioambiente. Habemos muchos -pero aún no los suficientes- que ya hemos incorporado la sustentabilidad como una filosofía de trabajo y no una meta.

El desafío está en entender que es una forma de trabajar y no una forma de vender el producto, y que es lo único que nos puede garantizar ser rentables y sostenibles en el tiempo, por lo tanto, es clave trabajar con toda la línea de valor y no de forma aislada.

La ley REP viene a plantear la urgencia en el tema, al mismo tiempo que nos desafía a pensar fuera de la caja y formar sistemas integrados público/privados para gestionar este inmenso desafío, tanto de recolección como reciclaje, jugando un rol de innovación, gestión del cambio y formación de agendas más colaborativas y asociativas.

La forma de resolver nuestros próximos desafíos como sociedad dependerán muchísimo de nuestra capacidad de estar más abiertos al cambio, más humildes, más empáticos, pero también más convencidos de que esta travesía debe ser de todos y con todos.

El compostaje, su proceso y beneficios

Mucho escuchamos del compostaje y cada vez son más personas las que lo realizan, pero ¿sabemos realmente cómo funciona y en concreto cuáles son sus beneficios?. En esta columna profundizaremos en el proceso, los tipos de compostaje y su utilidad.

¿Qué es el compostaje?

El compostaje es una transformación de la materia orgánica en una forma estable llamada compost.

La transformación la realizan diferentes microorganismos como bacterias, hongos, actinomicetos, entre otros. Durante el proceso se genera agua, calor y dióxido de carbono. El compostaje es también una forma de reducción de parásitos, patógenos y malezas, debido a la temperatura que alcanza el proceso.

Para que un compostaje sea exitoso se necesita 3 componentes: nutrientes, agua y aire u oxígeno. Bajo esas condiciones los micro organismos se multiplican y proceden a degradar la materia orgánica de los residuos.

La composición de los residuos varía según su origen, la gran mayoría se componen de nitrógeno (N) y carbono (C). Para que los micro organismos estén en las mejores condiciones para trabajar, lo óptimo es formar una mezcla de residuos en la cual el ratio entre la cantidad de carbono y la cantidad de nitrógeno es igual a 25.

 

¿Cuáles son sus etapas?

El proceso se divide en 3 fases:

- Mezcla de los residuos: La mezcla debe quedar suficientemente porosa para que el aire pueda circular y aportar el oxígeno que necesitan los microorganismos.

-Fermentación activa: Luego viene la degradación de las moléculas más simples de los residuos. En esta etapa la temperatura aumenta mucho debido a que las reacciones que ocurren son exotérmicas. Es necesario aportar oxígeno a los microorganismos para que puedan seguir viviendo, además de agua para obtener una humedad cercana a al 50%. Actúan mayormente bacterias y su duración depende de los residuos a tratar y de la técnica de compostaje utilizada.

- Maduración: Es la última fase del proceso y consiste en la degradación de las moléculas más complejas de los residuos como la celulosa. Acá se forman los precursores del humus. Esta etapa es en general más lenta y necesita menos oxígeno. Trabajan en particular actinomicetos y hongos. Luego de este proceso el compost está listo para usar.

¿Qué tipos de compostaje existen?

Existen dos tipos de compostaje; el que se realiza en casa y el industrial, en Armony hacemos el segundo.

Con el fin de hacer más rápido y eficiente el proceso, se han desarrollado tres técnicas de compostaje industrial que varían según como se administra el aire a la masa de residuos:

- Pilas: Esta técnica consiste en desarrollar el proceso en pilas, pequeños cerros de 3 metros de alto por 5 metros de ancho, y proveer el oxígeno, volteándolas con maquinarias como excavadoras o volteadoras, especialmente desarrolladas para eso. 

- Aireación forzada Otra opción es entregar el aire a través de una tubería perforada. El aire viene del exterior, es empujado a través de la tubería, sale por las perforaciones y pasa a través de la pila de producto en compostaje por lo que no necesita ser volteado. Esta técnica se utiliza en zonas abiertas o en contenedores y se llama aireación forzada positiva.

La técnica de aireación forzada negativa se utiliza en general para plantas de compostaje cerradas en galpón y funciona aspirando el aire a través de la tubería. En este caso el aire pasa del exterior hacia la tubería, a través de la mezcla. El aire esta entonces captado y se puede tratar con biofiltros para eliminar los olores.

- Compostaje en túneles: Es una mezcla de la dos anteriores. Se pone la mezcla en túneles con tuberías por debajo para realizar aireación. Por arriba de los muros del túnel, pasa una máquina con un tornillo dando vuelta el material dentro del túnel. Así combina las dos técnicas de aireación forzada y volteo.

A diferencia del compostaje industrial el compostaje en casa se puede realizar haciendo una pila con los residuos o utilizando una compostera, existen profesionales pero también sirve una caja que tenga hoyos para permitir la aireación. De todas formas, es necesario realizar volteos. En el compostaje domiciliario se utilizan los residuos orgánicos de la casa: residuos vegetales, restos de comida, pasto y poda, entre otros. También se puede realizar lombricompostaje, que utiliza lombrices. Este proceso no es en estricto rigor compostaje ya que no utiliza las bacterias, hongos y actinomicetos, sino que son las propias lombrices que se nutren de los residuos orgánicos (proteína animal), lo digieren y producen por defecación un humus que también es materia orgánica estable.

¿Qué residuos se pueden compostar?

Se pueden compostar los residuos vegetales de verduras, frutas, poda, carne, huevos, bolsas de te, papel, cartón, pasto, y los residuos de comida en general.

No se puede compostar vidrio, plástico, envases, y metal.

Teóricamente es posible compostar cualquier residuo orgánico, el éxito del proceso depende de la mezcla de residuos y la técnica. Lo que funciona mejor es mezclar distintos residuos. También depende del uso posterior del producto.

Se ha dicho que no es posible compostar limones. Efectivamente, los limones tienen en su cascara un aceite esencial antibacteriano que hace más lento el proceso. Una solución es realizar el compostaje con muchos otros residuos, de esa forma no debiera haber problema.

¿Qué aporte hace al medioambiente la compostación?

Compostar los residuos orgánicos permite evitar su disposición final en un relleno sanitario, donde los residuos se encuentran sin oxígeno por lo que realizan una fermentación anaeróbica que produce metano, gas de efecto invernadero que va hacia la atmósfera. El proceso de compostaje no produce metano, sí dióxido de carbono, el cual es un gas efecto invernadero 21 veces menos contaminante que el metano. En resumen, el compostaje permite disminuir la producción de gas efecto invernadero.

 

¿Cuáles son los beneficios del compost, el producto final?

El compost enriquece los suelos, ya que les entrega directamente materia orgánica y nutrientes. Asimismo, mejora su textura con lo que las raíces pueden crecer más fácilmente, aumenta la retención de agua en el suelo, haciendo más eficiente su uso, lo que permite disminuir los riegos y el uso de fertilizantes químicos susceptibles de provocar daños a las reservas de aguas profundas.

El compost recupera suelos degradados para que vuelvan a ser productivos. Se puede utilizar incluso en encapsulamiento de relaves mineros, plantando vegetación endémica sobre los pasivos ambientales.

También se utiliza en viveros y plantaciones de cultivos como los arándanos. Existe soluciones para que la planta crezca en bolsas rellenas con un compost especialmente desarrollado como  sustrato idóneo para su crecimiento. Eso permite utilizar suelos de mala calidad, ya que el arbusto no se planta directamente en la tierra, sino que en las bolsas con compost.

Nueva alianza entre Armony y Eco Italia

Junto a Eco Italia Spa hemos sellado una importante alianza estratégica que permitirá promover y asumir la práctica de la compostabilidad al interior de organizaciones y empresas, generando un apoyo concreto a la economía circular y a la eliminación del plástico en Chile con estándares claros y productos certificados.

Mediante esta alianza, creamos el servicio Llave en Mano, que facilitará y acercará la gestión de residuos orgánicos y la economía circular no sólo a grandes empresas, sino que también, a productores, personas, comunidades y organizaciones de la sociedad civil.

 

Sustrato especial para arándanos, estandarizado y al precio más competitivo

La empresa Rosario, especialista en biofertilizantes, con el apoyo del asesor experto en el cultivo de arándano en contenedores, Fernando Diez, desarrolló un sustrato estandarizado que presenta parámetros adecuados para el manejo de un huerto de arándanos de alto rendimiento, pero que entra al mercado a un menor costo que las alternativas traídas del extranjero. Diez destaca que es una mezcla local, pero totalmente caracterizada y estandarizada, lo que la convierte en una solución más confiable y uniforme que las mezclas artesanales que hasta ahora corríanpor cuenta de cada uno de sus asesorados.

El cultivo en sustrato constituye una solución técnica que permite superar condiciones físicoquímicas de suelos inadecuados para el cultivo, particularmente en zonas donde las demás condiciones se presentan favorables. Pero además, esta técnica aporta precocidad en la entrada a producción del huerto de arándanos, el que a los tres años sobre sustrato equivale a un huerto tradicional al sexto año de plantado. El cultivo del arándanos en contenedores elimina limitaciones físicas y químicas del suelo como altos contenidos de arcilla, baja macroporosidad, bajo nivel de materia orgánica o cuando el pH resulta pocofavorable para el cultivo. “Para satisfacer la necesidad de aireación de las raíces de arándano la macroporosidad debiera estar en el rango de 50-60%”, advierte Fernando Diez. Agrega que, “resulta complejo modificar la química del suelo cuando, por ejemplo, hay contenidos importantes de arcilla, debido a su capacidad tampón, siendo difícil mantener el pH ácido óptimo para esta especie, el que va de 4,5 a 5,5.

Un proyecto de arándano sobre suelos limitantes parte
con grados de dificultad de manejo y de costos
que muchas veces terminan arruinando el negocio”.

PARÁMETROS PARA ELEGIR SUSTRATOS

Existen distintas alternativas de sustratos, que varían en aspectos como la duración o vida útil, la necesidad de reposición de material o el régimen de aporte hídrico. Sin embargo, la elección no es solo técnica, “hay que ver cuál sustrato acomoda a la chequera del agricultor o cuyo costo es razonable según las condiciones del proyecto”, apunta el experto.

Explica que en el cultivo en contenedores se puede trabajar con combinaciones de distintos componentes, entre otros, corteza de pino compostada,turba, fibra de coco, perlita e incluso arena. “Se puede emplear distintas proporciones de materialesorgánicos, que aportan al cultivo, hasta el extremo de materiales totalmente inertes, con lo que se llega a la hidroponía, como podría ser un sustrato100% de fibra de coco. El mercado ofrece mezclas preparadas de diversos orígenes, por ejemplo de Finlandia, España ,Sri Lanka, Holanda, pero –hasta ahora-, siempre provenientes del extranjero. Si bien garantizan aspectos como uniformidad en el tamaño de partículas y menor contenido de polvo, lo que se relaciona con la vida útil, un gran problema es su alto precio”, señala Diez.

Sin embargo, sería apresurado concluir que la mejor alternativa técnica corresponde a un material completamente estable. “Trabajar con un medio 100% inerte es hidroponía, sin aporte nutricional ni capacidad de intercambio catiónico por parte del sustrato.

Manejo proyectos de ese tipo, pero implican una supervisión constante de lo que entra y de lo que sale del sistema. La planta depende totalmente de los aportes a través del agua y no hay espacio para equivocarse. En cambio en sistemas menos inertes, como la mezcla de Rosario, el sustrato hace de buffer y permite un mayor margen de error”, determina el especialista.

LAS VENTAJAS DE UN SUSTRATO LOCAL

-¿Cuáles son las principales desventajas de trabajar con sustratos importados?

Todas las soluciones para el arándano -hasta ahora han llegado desde fuera en este sistema de cultivo en macetas. con diferentes marcas y orígenes. Incluso rotulados como “sustratos para arándanos”. Pero cuando se mira los precios, en momentos en que el negocio exige poner atención a los costos, estos se arrancan de la realidad. Los grandes costos de un

proyecto de arándano en contenedor son dos. Por un lado las plantas, donde el precio depende de los obtentores y de los viveros, y estos últimos cobran a todos por igual. Por otro lado, el gran costo corresponde a la inversión en el sustrato, debido a los grandes volúmenes de material que se requieren, lo que dependerá del volumen del contenedor que se escoja.

-¿En términos generales, cuáles son las alternativas de sustratos con que se trabaja?

El sustrato puede ser una mezcla o puede ser puro.

Por ejemplo, solo fibra de coco o solo turba. Pero en cuanto a los sustratos puros, lo único que se ha vistoque ha funcionado bien, han sido las fibras de coco.

Aunque no cualquier fibra de coco, pero ese es otro asunto. Sin embargo, la fibra de coco no solo es muchomás cara, aunque algo ha bajado por la mayor competencia, sino que requiere de una mayor tecnología de operación, la que a su vez es mucho más cara, porque involucra manejos hidropónicos.

-¿Por qué sería más conveniente una mezcla local?

Primero que nada, porque tengo al fabricante acá y puedo ir a tocarle la puerta y reclamar si tuviera algún problema. Es con domicilio conocido, por lo que puedo ir y ver dónde y cómo se producen los materiales con que voy a trabajar, y -según las condiciones de fabricación que observo-, puedo determinar el nivel de estandarización del producto. Si el sustrato cambió, algo que suele suceder, ¿por qué cambio?

Incide en todo lo que tiene que ver con la confianza y con tener certeza de si lo vas a tener o no disponible.

Muchas veces me ha pasado que ya teniendo las plantas no llega el sustrato. Sin embargo, el principal valor de hacer algo más local es que existiendo materiales locales separados, solo faltaba unirlos para lograr una solución técnica competitiva en cuanto a precios. Contando con una buena estandarización de las características técnicas que requiere el producto.

Para lograr eso, nos apoyamos en la analítica del Laboratorio de Ingeniería y Suelos de la Universidad de Chile.

DATOS DUROS DETERMINADOS POR ESPECIALISTAS

-¿Tú trabajaste con Rosario desde el principio del desarrollo de esta alternativa de sustrato local?

Así es. Me solicitaron asesoría para generar una solución técnica buena y local. Lo primero que hicimos para entrar en el mercado fue adquirir el conocimiento técnico sobre qué se está usando en la industria.

Por esto es que caracterizamos los diferentes productos, para ver cuál era mejor que otros entre

los productos que son fuertes en el mercado local de sustratos. En ese contexto, plantié, ¿cómo “educas” a los clientes para que sepan comparar lo que se le está vendiendo? Aparte de que el vendedor les diga “tengo 1.500 hectáreas con mi producto”, lo que no significa nada. ¿Son buenos, son malos para el arándano?,¿cuánto me va a durar?, finalmente, ¿qué seesta comprando?. Por esto decidimos acudir al Laboratorio de Ingeniería y Suelos de la Universidad de Chile, para lograr las especiales condiciones técnicas que solicité. Por ejemplo, la capacidad de aireación, la cantidad de agua fácilmente disponible, el agua de reserva que mantiene el volumen de sustrato a las diferentes tensiones, hasta qué tensión la planta es capaz de extraer el agua. Entre otros parámetros.

-¿Todo eso apuntando a un volumen específico de contenedor?

Eso además apuntando a un volumen estandarizado, por ejemplo, habiendo determinado cómo funcionan esos materiales en 40 litros de sustrato. Gracias a la analítica del Laboratorio de Ingeniería y Suelos de la Universidad de Chile, nos pudimos dar cuenta de que hay mucha diferencia entre unos y otros, así como en sus condiciones de manejo.

Ahora, claro, todos terminan siendo un vehículo, pero es muy bueno entender las condicionantes de tu vehículo para poderlo manejar. ¿Cómo logramos una menor degradación para ganar vida útil?, ¿cómo lograr entre el 40% y el 60% de aireación que se requiere para que se comporte mejor el arándano?, ¿cuál de los sustratos me entrega más agua fácilmente aprovechable?. Con esa información nos dimos cuenta de cómo varía según el tipo y composición de los sustratos. Entonces, lo primero fue contar con información dura para poder entregar valores, ya que en base a una caracterización técnica es más fácil tomar decisiones. En el fondo desarrollamos un sustrato que estuviera dentro de los parámetros de manejo de las mejores marcas, pero que presenta un menor costo.

DE QUÉ ESTÁ COMPUESTO EL PRIMER SUSTRATO PARA ARÁNDANOS DESARROLLADO EN CHILE

“El sustrato para arándanos en macetas que diseñamos con Rosario es hoy una mezcla única. Está compuesto por corteza de pino compostada, con diferente granulometría, lo que incide positivamente en la aireación y en el periodo de descomposición.

Pero que, además, contiene un porcentaje adecuado de fibra de coco a fin de lograr las condiciones técnicas que se requieren para la estabilidad, buen movimiento del agua, correcto porcentaje de retenciónhídrica que se necesita y de agua fácilmentedisponible. Siempre teniendo en vista que el costo fuera competitivo. De tres combinaciones que funcionaban muy bien en arándanos, llegamos a dos de costo competitivo y de ellas elegimos la técnicamente superior. La más cara quedó fuera en consideración al costo de la mezcla”, detalla Diez.

-¿Cuánto definieron que debe durar este sustrato?

Este sustrato, por las condiciones que presenta, tranquilamente debe trabajar bien entre seis y ocho años. Ahora, en esos siete u ocho años no habría que hacer nada. Con todos los sustratos se tiene que hacer algo en algún minuto, pero el de Rosario fue diseñado pensando en el estilo de cultivo chileno, que es a largo plazo. Si hay que repararlo se hace, pero de modo que la planta siga funcionando sin ningún problema.

-¿Para qué volumen fue pensado el sustrato?

El sustrato es óptimo para volúmenes desde 40 litros. O sea, es un sustrato que debe funcionar bien en volúmenes de 40, 50 o 60 litros, pero en consideración al costo, con 40 litros anda bien. No recomiendo volúmenes menores porque en el largo plazo el sistema se complica ya que todo el espacio termina siendo ocupado por el sistema radicular de la planta.

EL PROBLEMA DE LAS MEZCLAS ARTESANALES

Explica Fernando Diez que muchos quienes entran en el cultivo de arándanos en contenedores optan por hacer sus propias mezclas en el campo. “Mis clientes me decían, “no te preocupes, voy a hacer bien mi mezcla”, pero siempre tuvimos problemas por el tipo de maquinaria, por los ingredientes, por las proporciones, etc.”, señala el asesor. “Ese es uno de los grandes problemas que encuentro. Particularmente, al comienzo del cultivo de arándanos en sustratos se utilizaron solo mezclas artesanales, pero de un camión a otro cambiaban las características del material. No se sabe por qué debido a que no se está presente o porque no se tiene la experiencia para reconocer los cambios de material, los tamices, el tipo de compost, si está bien compostado o no. En ocasiones me decían que era de pino, pero finalmente era aserrín. O sea,de una granulometría inadecuada. Pero recién te das cuenta en base al comportamiento del cultivo, cuando ya es tarde”, advierte el especialista.

Según el asesor internacional Fernando Diez el sustrato para arándanos desarrollado por Rosario presenta la ventaja de ser una mezcla local, pero totalmente caracterizada y estandarizada, lo que por un lado la convierte en una solución mucho mas confiable y uniforme que las mezclas artesanalesque hasta ahora corrían por cuenta de cada uno de sus asesorados y, por otro lado, se encuentra en el mercado a un precio más conveniente que las alternativas traídas del extranjero.


Nota Redagrícola junio 2019

Tecnosuelos y economía circular: solución para la mejora ambiental y productiva para ecosistemas degradados o contaminados

Una cuestión de sentido común…

La gestión sostenible del medio ambiente y los recursos naturales es crucial para el crecimiento económico y el bienestar humano. Cuando se administran bien, los recursos naturales renovables, las cuencas hidrográficas y los paisajes terrestres y marinos productivos pueden ser la base del crecimiento sostenido e inclusivo, la seguridad alimentaria y la reducción de la pobreza.

Sin embargo, la integridad y la funcionalidad de estos activos naturales esenciales se ven cada vez más comprometidas. De acuerdo a cifras del Banco Mundial (2018), entre el 60 % y el 70 % de los ecosistemas del mundo se están degradando más rápido de lo que pueden recuperarse. La gestión inadecuada del medio ambiente y los recursos naturales da lugar a pérdidas económicas considerables. Por ejemplo la contaminación atmosférica ahora es el cuarto factor de riesgo más importante de muertes prematuras, y contribuye a 1 de cada 10 muertes en todo el mundo y da lugar a grandes pérdidas de bienestar e ingresos.

¿Y que ocurre en Chile?

Chile es un país cuya economía depende de sus recursos naturales, sean éstos renovables o no. La minería aparece como la principal actividad económica, aportando con 9,8 % del PIB el 2018. El sector agropecuario – silvícola con un 3,2 % y el sector electricidad, gas y agua con un 3,1 %. El factor común de todos estos sectores es la producción de residuos. Al respecto, solamente la minería deposita alrededor de 1.800.000 toneladas por día, equivalentes a 3 cerros Santa Lucía por semana. El sector sanitario en Chile genera anualmente 700.000 metros cúbicos de lodos, de los cuales el 57 % debe ir a rellenos sanitarios (cuando los hay), con los problemas de olores y la contribución al calentamiento global con las emisiones de metano. El sector agropecuario también produce una cantidad importante de residuos orgánicos, que no son fácilmente compostables (purines, alperujos), con el consiguiente problema de olores. Todas estas cifras, dejan afuera los residuos orgánicos domiciliarios, cuya producción bordea los 0,8 Kg/día/habitante.

¿Y quién podrá defendernos?

Del problema en su totalidad, nadie. Sin embargo, existen nuevas innovaciones que ayudan y pueden aportar en la conversión de pasivos ambientales a activos ambientales, y este es el caso de los tecnosuelos.

¿Qué es un tecnosuelo?

El concepto de Tecnosol (tecnosuelo) lo definió la FAO el año 2006 integrándolo como una categoría a la World Reference Base for Soil Resource (WRB). Corresponde a un sustrato que contiene más de un 20 % de “artefactos” en peso o volumen. Por artefactos se entienden todos los materiales terrestres que están en la superficie y que han sido hechos, manipulados o cambiados de sitio por el hombre. Antiguamente la FAO los denominaba materiales antropogeomórficos.

La experiencia con el uso de este tipo de sustratos, utilizados siempre en función de un objetivo previamente fijado, que puede ser desde mejorar las condiciones de un suelo en sus propiedades físico – químicas, controlar procesos de degradación ambiental física o química, o incluso reconstruir paisajes dañados por la actividad industrial, es muy prometedora. Ejemplos hay: las tierras pretas brasileñas, los arrozales en China o rehabilitando terrenos utilizados por la minería. Uno de los ejemplos más claros es el ejemplo son las minas de As Pontes, y más tarde la mina del Touro, en Galicia, España, que tuve el privilegio de visitar.

Posibilidad cierta para la minería…y otras industrias.

La palabra “Minería” en Chile, al margen de minerales y divisas, significa residuos, y en volúmenes difíciles de imaginar. Si bien se ha hecho esfuerzos por que el sector minero se haga cargo de ellos (Ley nº 20.551), hasta la fecha la minería no había podido acceder a soluciones que pudiesen hacerse cargo del problema, sobre todo por la escala.  Sin embargo, haciendo uso de esta innovación por primera vez la minería puede acceder a una solución. A este respecto, el caso español es muy interesante de analizar.

En los depósitos relaves de la mina de As Pontes, en Galicia, al no disponer de suficiente "tierra vegetal” para su rehabilitación, se elaboraron tecnosuelos a partir de diferentes materiales de la propia mina, como arenas, arcillas caoliníticas y micáceas o pizarras de diferente composición y grado de alteración, a las que se añadían cenizas de combustión de la central térmica y algunos residuos orgánicos disponibles. Con estos suelos, entre los años 1982 y 2007, se rehabilitaron más de la tercera parte de los depósitos de relaves (escombreras en España), con una extensión superior a las 1000 ha, y los bordes de mina, con una extensión de unas 400-500 ha. Hoy el relave de la mina de As Pontes es un ejemplo de recuperación, con diferentes premios, en la que además de haber mejorado la calidad de las aguas y recuperado el paisaje se ha desarrollado una extraordinaria biodiversidad vegetal y animal.

En la mina de cobre de El Touro, explotada durante 14 años (1974-1988), se han restaurado más de 400 ha con diferentes "suelos artificiales", a los que desde el año 2006 llamamos Tecnosuelos (tecnosoles). Los depósitos de relaves tenían inicialmente un pH inferior a 3.0, altos niveles de Al, sulfatos, Mn, etc., en la disolución, que hacían imposible el crecimiento vegetal y, por tanto, el desarrollo de la cadena trófica. La vida estaba reducida a la presencia de organismos extremófilos (arqueobacterias, bacterias y algas resistentes a las condiciones hiperácidas, hiperoxidantes e hiperconductoras existentes en esos medios). No había hierba alguna, ni insectos, ni anfibios, reptiles o aves; y cada litro de agua formado a partir de la interacción de la lluvia con los materiales de los relaves de la mina contaminaba de 1000 a 10000 litros de agua dulce de los cursos de agua del entorno minero, de los que desaparecieron todos los peces, anfibios e insectos acuáticos.

La aplicación de diferentes Tecnosoles corrigió la situación, recuperándose la cadena trófica hasta los depredadores finales, la calidad de las aguas y las poblaciones acuáticas, y los suelos, aguas, ecosistemas y paisaje.

¿Y la economía circular, donde entra?

De acuerdo con la Unión Europea (2015), la economía circular consiste en alcanzar un modelo económico y productivo en el que “el valor de los productos, los materiales y los recursos se mantenga en la economía durante el mayor tiempo posible, y en la que se reduzca al mínimo la generación de residuos”. Es un concepto muy potente, y que puede aportar una parte de la solución a la abundante generación de residuos que tienen distintas industrias en Chile. La otra parte la aportan los tecnosuelos.

Actualmente, un grupo de investigadores y profesionales de la U. de Chile, de la U. de Santiago de Compostela en españa, de la U. de Orléans en Francia y de dos empresas: GEOSOLUM Y ARMONY Sustentable, con el apoyo de Aguas Andinas S. A. y la Comunidad de Aguas del Embalse La Paloma (CASEP), que agrupa a los agricultores de los embalses Recoleta , Cogotí y La Paloma, y financiados por el Gobierno Regional de Coquimbo, están trabajando en una solución que combina ambos conceptos: tecnosuelos y economía circular.

El objetivo es fabricar un sustrato a gran escala, que logre imitar un suelo tanto en sus funciones productivas como ecológicas, y que pueda ser dispuesto sobre los depósitos de relaves, permitiendo el control de la erosión y facilitando el desarrollo de la vida. Los insumos para tal desafío vienen de las plantas de tratamiento de aguas servidas y de los sedimentos de los embalses de riego agrícola, por ahora.

En resumen, el proyecto podría hacerse cargo de tres residuos: relaves mineros, lodos y sedimentos, provenientes de tres sectores importantísimos de la economía: minería, agricultura y del sector sanitario. Los beneficios son múltiples: transformar pasivos ambientales en activos, hacerse cargo de los residuos de industrias que no tenías solución y que aportan mucho a las economías regionales, bajar la tasa de emisión de gases de efecto invernadero al hacer uso de los lodos…En fin, las proyecciones son auspiciosas y se requiere el apoyo fuerte del Estado y el sector privado para poder continuar.

Estamos ad-portas de desarrollar una gran innovación, y que, de poder ser escalada, va a venir en ayuda, no solo de las empresas, sino también de comunidades, de personas que habitan el campo y las ciudades, que se ven afectadas todos los días ya sea por la contaminación del relave, ya sea por los olores de los lodos.